Pimientos de Gernika (docena)

3,00

Adquiere el nombre genérico de Gernika, pero no se circunscribe a la localidad vizcaína y sus alrededores, puesto que el requisito geográfico es bastante amplio. Se exige que se produzca en zonas de clima Atlántico del País Vasco.

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    Pimientos de Gernika, cultivados en Arrankudiaga.

    los Pimientos de Gernika, se comen como acompañamiento de un segundo plato o como ración, porque en sí mismos constituyen una delicatessen culinaria. El Pimiento de Gernika se distingue por un tamaño pequeño. De la familia de las solanáceas, especie “Capsicum annuum”,  el Pimiento de Gernika se caracteriza por ser estrecho y alargado. Su tamaño oscila entre los seis y nueve centímetros y tiene una textura tersa y un color verde intenso. La anchura debe ser de dos a tres centímetros, termina en punta cónica larga y se admiten algunas pequeñas curvaturas.

     

    La producción del Pimiento de Gernika tiene lugar de mayo a octubre, si bien está sujeta a las condiciones meteorológicas. Desde su plantación, al momento de la recolección suelen pasar entre treinta y sesenta días, dependiendo del medio de cultivo, la época en la que se planta y el tiempo que transcurre el plantel en el semillero. El productor vigila su crecimiento y escoge el momento de la recogida sin dejarle madurar demasiado y cuidando que se ajuste a las características de tamaño.

     

    Adquiere el nombre genérico de Gernika, pero no se circunscribe a la localidad vizcaína y sus alrededores, puesto que el requisito geográfico es bastante amplio. Se exige que se produzca en zonas de clima Atlántico del País Vasco. Que cuenten con un índice de evapotranspiración real superior a 585 mm y el baremo comprende enteras las provincias de Bizkaia y Gipuzkoa y buena parte de Araba. Concretamente, de este territorio, la Zona Cantábrica (Ayala, Okondo, Llodio, Amurrio y Artziniega. Zona de Estribaciones del Gorbea, municipios de Urkabustaiz, Zuya, Zigoitia, Legutiano y Aramaio) y los municipios de Zalduondo y Asparrena en la Llanada Alavesa. Todas estas zonas resultan idóneas para el cultivo del pimiento por una humedad relativa alta, temperaturas moderadas, baja oscilación térmica, suelos ligeramente ácidos y suficiente circulación de aire para favorecer el movimiento de polen entre las distintas plantas.

    Formato

    Docena

    50